Había una vez una rana que vivía en un estanque. Un día, su hijo vio por casualidad un elefante cerca del estanque, La rana bebé volvió con su madre y le dijo entusiasmada: «¡Mamá, hoy he visto un animal enorme!».
La rana madre preguntó: «¿De verdad? ¿De qué tamaño era el animal?»
La ranita respondió: «Oh, era mucho más grande que tú».
La rana hinchó el cuerpo y preguntó: «¿Tanto más grande?».
El bebé respondió: «Oh, no, mucho más grande».
La madre hinchó más su cuerpo y preguntó: «¿Así de grande?
Su hijo respondió: «No, no madre, mucho más grande que eso».
De este modo, la rana madre fue hinchando su cuerpo cada vez más y cada vez la rana bebé seguía diciéndole: «mucho más grande, mucho más grande».
Finalmente, mientras intentaba hinchar su cuerpo más allá de los límites, el vientre de la rana explotó con una gran explosión.

Significado:
Las insignificantes entidades vivientes que se consideran a sí mismas como «para- brahma» (para = supremo, brahma = Ser Absoluto), o como si nada fuera igual o más grande que ellos mismos, a pesar de que simplemente son entidades insignificantes mal concebidas que se dedican constitucionalmente al servicio devocional, se encaprichan en ser iguales en perfección a un alma liberada. Suelen ser destruidos como una rana hinchada debido a su falso ego.
«Hay muchos especuladores filosóficos (jnanis) pertenecientes a la escuela Mayavada que se consideran liberados y se llaman a sí mismos Narayana. Sin embargo, su inteligencia no está purificada a menos que se dediquen al servicio devocional de Krishna.»
(Caitanya-caritamta – Madhya Lilã 24.29)
«El Señor es el amo de las potencias, y la entidad viviente es el servidor de ellas. Esa es la diferencia entre el Señor y la entidad viviente. Sin embargo, tú declaras que el Señor y las entidades vivientes son lo mismo».
(Cc – Madhya Lilã 6.162)
Sri Caitanya Mahaprabhu exclamó inmediatamente: «¡Visnu! ¡Visnu! No Me llames la Suprema Personalidad de Dios. Una jiva no puede convertirse en Krishna en ningún momento. Ni siquiera digas tal cosa!».
«Un sannyasi en la orden renuncia es ciertamente parte y parcela del todo completo, igual que una brillante partícula molecular de sol es parte y parcela del sol mismo. Krishna es como el sol, lleno de seis opulencias, pero la entidad viviente es sólo un fragmento del todo completo. «
«Una entidad viviente y la Personalidad Absoluta de Dios nunca deben considerarse iguales, del mismo modo que una chispa fragmentaria nunca puede considerarse la llama original.»
(Cc – Madhya Lila 18.111-113)
«Un necio que dice que la Suprema Personalidad de Dios es lo mismo que la entidad viviente es un ateo, y queda sujeto al castigo del superintendente de la muerte, Yamarãja».
(Cc – Madhya Lilã 18.115)

N.B.
Al narrar esta fábula de la rana que explota, Srila Bhaktisiddhanta Sarasvati Gosvami Prabhupada solía instruir que es mejor ser un buen hombre que ser uno grande. «Yo soy Brahman» , «Yo soy siddha» «Yo soy Vaisnava», «Yo soy pandita», «Yo soy auto-realizado» – este tipo de ego falso es la causa raíz de la esclavitud de las entidades caídas. Aquel que está iluminado con devoción pura por Sri Hari, nunca se concibe a sí mismo como el señor de esta naturaleza material o el disfrutador de este mundo material, como un gran trabajador, un gran predicador y cosas por el estilo. Tal persona debe darse cuenta de que es tan insignificante como eternas partículas de polvo bajo los pies de su maestro espiritual y de todos los vaisnavas. El posee una humildad muy cándida todo el tiempo en su corazón. Una entidad viviente nunca puede ser para-brahma, así como Ravana nunca puede ser el Señor Sri Ramacandra.

👑Upakhyane Upadesa – Instructives stories from Srila Bhaktisiddhānta Saraswati Thakur.